No fracasaste

Todo tiene su tiempo... Tiempo para nacer y tiempo de morir, tiempo de plantar y tiempo de arrancar lo plantado.

Eclesiastés 3:1-2

A lo largo de la vida todos invertimos el tiempo de forma distinta, trabajo, estudios, relaciones interpersonales, emprendimientos, hobbies, etc.

Sin importar quien seas, todos plantamos, cuidamos y damos nacimiento a distintos objetivos.

Así también, muchos de los proyectos que sembremos van a tener finales distintos.

Quizá cosechemos las metas que tanto anhelamos, capaz que lo que sembramos muere antes de tiempo, o puede ser que nosotros tengamos que tirar la cosecha porque su fruto no era bueno.

Pero sea cual sea el final, no olviden que el resultado de un proyecto no nos da identidad.

No sos un fracaso porque no pudiste cumplir eso que tanto anhelabas.

Si tú identidad está en Cristo el final de un sueño no va ser tu final; sino el inicio de una temporada en tu vida.